La laguna de Olomega es una de las fuentes de agua más grandes en el oriente del país y es uno de los siete humedales de importancia internacional que tiene El Salvador, por lo que los ganaderos de la zona están cambiando sus prácticas productivas para reducir su contaminación.
Verónica Vázquez es una joven ganadera del municipio de El Carmen, ubicado en las riberas de esta laguna, en el departamento de La Unión. Como beneficiaria del “Proyecto piloto de implementación de buenas prácticas ambientales en ganadería en la zona de amortiguamiento de humedales”, aprendió a producir su propio abono orgánico.
Ella procesa el estiércol de su ganado y otros residuos orgánicos que se generan en su finca a través de un lombricultor, infraestructura construida en el marco de este proyecto piloto, y obtiene lombrices de tierra que luego dan como resultado abono sólido y líquido.
Los ganaderos utilizan este abono para los pastos, los cultivos, las hortalizas y los frutales. Este es uno de los impactos positivos que ha tenido el proyecto con la metodología de escuela de campo, que se desarrolla a partir de 2019, donde los ganaderos también aprendieron sobre sistemas silvopastoriles, biodigestores y reservorios de agua.
“Hemos cambiado el abono químico por el orgánico, que es mucho mejor, comemos más saludable, es una nueva forma de generar ingresos y mejorar el medio ambiente”, recalcó Vásquez.
Durante la cuarentena, Verónica decidió elaborar y poner a prueba su abono orgánico en dos plantas de tomate que sembró. A una le aplicó del abono que produce en su lombricultor, y está desarrollándose mejor que la otra, con más flores y follaje. “Esta, a la que apliqué el abono, está más bonita y se ha desarrollado mejor”, destacó.
Con la puesta en marcha de estas buenas prácticas se logran importantes beneficios para la conservación de estos sitios en el mediano y largo plazo, principalmente en cuanto la reducción de la contaminación del cuerpo de agua por agroquímicos y estiércol de ganado.
Este proyecto piloto se desarrolla en tres humedales: laguna de Olomega, laguna El Jocotal y Bahía de Jiqulisco. Además, es parte de los resultados del proyecto “Conservación, uso sostenible de biodiversidad y mantenimiento de servicios del ecosistema en humedales protegidos de importancia internacional”, que implementamos como Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), con el apoyo del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF por sus siglas en inglés) y es administrado financieramente por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).